Desde los tiempos de la conquista española el destino de Nicaragua ha estado marcado por su posición geográfica y por las características de su territorio; colocada entre los océanos Atlántico y Pacífico, La comunicación natural entre el río San Juan y el Gran Lago de Nicaragua despertó desde el primer momento en los españoles la ambición de lograr un paso entre los dos mares, En el siglo XIX la expansión del capitalismo mundial se vio en la necesidad de contar con vías marítimas más económicas y rápidas para el transporte de materias primas.-Así cuando los cinco países que bajo el régimen colonial español formaban el Reino de Guatemala declaran su independencia en el año de 1821, la disputa entre Inglaterra y los Estados Unidos comenzará a afectar el curso de la política interna de estas provincias. Pronto se iniciaría una cruenta sucesión de guerras civiles, La Iglesia Católica y los viejos terratenientes criollos estaban empeñados en combatir a los caudillos liberales Las antiguas provincias se separan y la reacción vuelve a ocupar el poder en cada una de ellas, pobres, obscuras y aisladas, tiranizadas por fanáticos religiosos,-Uno de los países desmembrados de la federación, que más padeció guerra civiles fue Nicaragua. Los españoles habían fundado en su territorio dos ciudades. Granada, a orillas del Gran Lago y abierta a la comunicación del Atlántico a través del río San Juan, la ruta canalera; y León, primeramente junto al Lago Xolotlán y trasladada en el siglo XVII un poco más hacia el occidente, por causa de violentos sismos, y cuya salida hacia el Pacífico era el importante puerto colonial de El Realejo.Estas dos ciudades, poco comunicadas entre sí, organizaron su vida económica en forma autónoma, realizando en forma independiente su comercio a través de sus propios puertos; y ejercían su control político independiente sobre las regiones rurales de cuya agricultura eran dueñas, creándose así una división a la vez rural y política: Ambas ciudades aparecían como sustitutos de un Estado nacional inexistente. El resto del país no era más que una inexplorada e ignota extensión territorial, pues las únicas tierras cultivadas eran las de la franja del Pacífico, lugar de los asentamientos coloniales donde también se había congregado la mayoría de la población mestiza pobre que rendía su mano de obra en las haciendas de añil y de cacao, junto con la explotación ganadera.De esta manera, los finqueros y comerciantes arrastraban a los campesinos a la vorágine de las guerras civiles, En el año de 1854, el Partido Conservador de los granadinos llamado el Legitimista, y el Partido Liberal de los leoneses llamado el Democrático, entraron en un nuevo conflicto.-Comenzaba a consolidarse ya el poder de los Estados Unidos y el Presidente James Monroe proclamó en 1823 su doctrina de América for the americans.Era necesaria la construcción de un canal interoceánico cuyas opciones eran Nicaragua y Panamá; Inglaterra reconoció oficialmente este derecho canalero sobre Nicaragua a los Estados Unidos, por medio del Tratado Clayton-Bulwer firmado en el año de 1850, sin, por supuesto, intervención alguna de Nicaragua,-
subtituloAugusto César Sandino había nacido el 18 de mayo de 1895, en el pequeño pueblo de Niquinohomo, formado por chozas de paja y lodo, de campesinos que trabajan como peones agrícolas en las plantaciones de café, región que es también de maizales, tabacales y platanares, localizada en el departamento de Masaya, el más densamente poblado de la república. Junto a la iglesia colonial que se levanta frente a una humilde plaza, (Una ironía del destino haría que en un pequeño radio territorial que no alcanza diez kilómetros, nacieran, Sandino en Niquinohomo, y en otros pequeños poblados más hacia el sur, José María Moncada en Masatepe, y Anastasio Somoza, en San Marcos).A aquel grupo de ladinos de fortuna de Niquinohomo, pertenecía su padre don Gregorio Sandino, de cuya relación con una campesina de nombre Margarita Calderón, que recogía café en su propiedad, resultaría este hijo único nacido el mismo año en que José Martí caía en Cuba luchando por la independencia de su patria.Cuando Sandino tenía nueve años, y antes de pasar a la casa paterna, su madre fue tomada prisionera por una deuda de naturaleza servil; y es también costumbre que los niños tengan que ir con sus padres a la cárcel si no hay quien vea por ellos . Allí en el calabozo, vería él cómo su madre, embarazada, se desangraba por causa de un aborto; así, su infancia maduraría entre interrogantes sobre la verdad de la justicia.Tendría veinte años cuando dejaría la casa de su padre, para buscar la manera de hacer su vida por sí mismo y así recorrió haciendas y plantaciones trabajando como ayudante de mecánica.-Sandino se empleó en La Ceiba como guardalmacén del Ingenio Montecristo, propiedad de la Honduras Sugar & Distilling Co. En el año de 1923 tendría que dejar Honduras y llegó a Guatemala, donde se colocó como peón bananero en las plantaciones de la United Fruit Company en Quiriguá; ese mismo año seguiría viaje hacia México, donde comenzaría a trabajar en Tampico para la South Pensylvania Oil Co. En 1925 pasó al campamento que la Huasteca Petroleum Co., tenía en Cerro Azul, Estado de Veracruz y fue nombrado jefe de un departamento de venta de gasolina al por mayor, donde, estuvo hasta su viaje de regreso a Nicaragua en junio de 1926.Ya en el país, se dirigió a la mina de San Albino, también de propiedad norteamericana, situada en la región norte de Nicaragua, y en las vecindades de lo que más tarde sería el teatro de la guerra sandinista; allí se empleó y comenzó a realizar una labor de proselitismo entre los mineros, a favor de la causa nacionalista. En octubre había formado una pequeña columna de soldados sacados de entre los trabajadores y con sus ahorros compró unos pocos viejos rifles a traficantes de armas de la frontera con Honduras.La guerra civil, según Sandino debía ser también una guerra contra la intervención extranjera, y por eso buscó dar su propia batalla dentro de esas filas. Libró con sus hombres el primer combate el 2 de noviembre de 1926, atacando la población de El Jícaro, en manos de fuerzas del gobierno. La mala preparación de su columna y la escasez y pésima calidad de las armas y municiones, harían que sufriera una derrota, pues no pudo ocupar la plaza. Pero aquella pérdida, sólo serviría para reafirmar su vocación de lucha; reagrupó a su gente y después de dejarla bajo seguro en un lugar, que después llegaría a ser un reducto legendario de la guerrilla sandinista, el cerro de El Chipote, en el. corazón de las montañas segovianas, se dirigió con unos pocos hombres hacia la Costa Atlántica, donde estaba el grueso de las tropas liberales, viajando por pipante a través del río Coco, en medio de la selva, con soldados sandinistas, indígenas formarían una eficiente aunque primitiva marina de guerra con sus pimpantes, llevando por el río guerrilleros, municiones y alimentos.Varías semanas después alcanzó al General Moncada en Río Grande y se entrevistó con él para solicitarle armas y municiones, para su gente, que según sus planes formaría una columna segoviana que operaría en la región norte del país, al iniciarse la marcha del ejército hacia el Pacífico. Moncada se negó, y Sandino siguió para Puerto Cabezas, donde estaba Sacasa con su gobierno, llegando allí para la Navidad de 1926, precisamente cuando la Marina de Guerra declaraba la zona neutral y desarmaba a Sacasa, lanzando el armamento al agua. En aquellas guerras civiles los ejércitos eran formados con peones de las haciendas, y los hacendados, actuaban como generales; el gobierno reclutaba forzosamente a los campesinos para enviarlos al frente de batalla, sin ninguna preparación militar previa y armados de viejos rifles Krag que se habían utilizado en la guerra entre Estados Unidos y España a finales del siglo anterior, con lo que las mortandades eran terribles, pues además se peleaba con tácticas cerriles, avances descubiertos de infantería, encuentros cuerpo a cuerpo, sitio de poblaciones, mientras los generales permanecían a la retaguardia, siempre convenientemente lejana. Guerra civil significaba hambre y viudez, los miembros y las familias quedaban abandonadas y los caminos se llenaban de niños pordioseros huérfanos. Sandino aparecía como un General del pueblo que lejos de rehuir la lucha, participaba en ella brazo a brazo con los soldados de su columna, que multitudinaria pero disciplinadamente andaban tras él y tras la bandera enarbolada desde entonces en sus filas de colores rojo y negro, con la inscripción LIBERTAD O MUERTE.. Moncada, interrogó a Sandino, en reclamo: -¿Y a usted, quién lo hizo General? -Mis hombres, señor - respondería él.-Después de haber batido a las fuerzas del gobierno en San Juan de Segovia y Yucapuca tras una batalla de 12 horas, la columna segoviana de Sandino toma en marzo de 1927 la ciudad de Jinotega, marchando en el flanco derecho de Moncada, y el 2 de mayo, cuando Moncada se prepara a la rendición frente a Mr. Stimson, ocupa Sandino el Cerro del Común, frente a la ciudad de Boaco, Sandino examina esa larga noche de meditaciones en el Cerro del Común,Tiene dos alternativas: entregar las armas, licenciar a sus hombres; o resistir hasta la muerte frente al poderoso ejército de los Estados unidos, Los intereses que tradicionalmente se ponían en juego en las guerras civiles, indicaban que era una locura resistir; a Sandino se le estaban ofreciendo mulas, caballos, dinero, un puesto público como Jefe Político del departamento de Jinotega, prebendas y granjerías.-Sandino decidió aquella noche resistir, más con ánimo de sacrificarse como un ejemplo futuro, que con pretensiones de una victoria militar. Aquella decisión transformaría una guerra civil de facciones oligárquicas, en una larga guerra de liberación nacional; transformaría una guerra de soldados reclutados a la fuerza y de generales oportunistas, en una guerra en que generales y soldados serían todos pobres e hijos del pueblo, que andarían en harapos, que se llamarían unos a otros hermanos y cuya consigna escrita al pie de todos sus documentos oficiales( junto a un sello que representaba a un campesino decapitando con un machete a un soldado yanqui,) sería la de Patria y Libertad; y aquella guerra convencional de montoneras, se transformaría en la primera guerra de guerrillas librada en el continente americano.
subtituloAugusto César Sandino había nacido el 18 de mayo de 1895, en el pequeño pueblo de Niquinohomo, formado por chozas de paja y lodo, de campesinos que trabajan como peones agrícolas en las plantaciones de café, región que es también de maizales, tabacales y platanares, localizada en el departamento de Masaya, el más densamente poblado de la república. Junto a la iglesia colonial que se levanta frente a una humilde plaza, (Una ironía del destino haría que en un pequeño radio territorial que no alcanza diez kilómetros, nacieran, Sandino en Niquinohomo, y en otros pequeños poblados más hacia el sur, José María Moncada en Masatepe, y Anastasio Somoza, en San Marcos).A aquel grupo de ladinos de fortuna de Niquinohomo, pertenecía su padre don Gregorio Sandino, de cuya relación con una campesina de nombre Margarita Calderón, que recogía café en su propiedad, resultaría este hijo único nacido el mismo año en que José Martí caía en Cuba luchando por la independencia de su patria.Cuando Sandino tenía nueve años, y antes de pasar a la casa paterna, su madre fue tomada prisionera por una deuda de naturaleza servil; y es también costumbre que los niños tengan que ir con sus padres a la cárcel si no hay quien vea por ellos . Allí en el calabozo, vería él cómo su madre, embarazada, se desangraba por causa de un aborto; así, su infancia maduraría entre interrogantes sobre la verdad de la justicia.Tendría veinte años cuando dejaría la casa de su padre, para buscar la manera de hacer su vida por sí mismo y así recorrió haciendas y plantaciones trabajando como ayudante de mecánica.-Sandino se empleó en La Ceiba como guardalmacén del Ingenio Montecristo, propiedad de la Honduras Sugar & Distilling Co. En el año de 1923 tendría que dejar Honduras y llegó a Guatemala, donde se colocó como peón bananero en las plantaciones de la United Fruit Company en Quiriguá; ese mismo año seguiría viaje hacia México, donde comenzaría a trabajar en Tampico para la South Pensylvania Oil Co. En 1925 pasó al campamento que la Huasteca Petroleum Co., tenía en Cerro Azul, Estado de Veracruz y fue nombrado jefe de un departamento de venta de gasolina al por mayor, donde, estuvo hasta su viaje de regreso a Nicaragua en junio de 1926.Ya en el país, se dirigió a la mina de San Albino, también de propiedad norteamericana, situada en la región norte de Nicaragua, y en las vecindades de lo que más tarde sería el teatro de la guerra sandinista; allí se empleó y comenzó a realizar una labor de proselitismo entre los mineros, a favor de la causa nacionalista. En octubre había formado una pequeña columna de soldados sacados de entre los trabajadores y con sus ahorros compró unos pocos viejos rifles a traficantes de armas de la frontera con Honduras.La guerra civil, según Sandino debía ser también una guerra contra la intervención extranjera, y por eso buscó dar su propia batalla dentro de esas filas. Libró con sus hombres el primer combate el 2 de noviembre de 1926, atacando la población de El Jícaro, en manos de fuerzas del gobierno. La mala preparación de su columna y la escasez y pésima calidad de las armas y municiones, harían que sufriera una derrota, pues no pudo ocupar la plaza. Pero aquella pérdida, sólo serviría para reafirmar su vocación de lucha; reagrupó a su gente y después de dejarla bajo seguro en un lugar, que después llegaría a ser un reducto legendario de la guerrilla sandinista, el cerro de El Chipote, en el. corazón de las montañas segovianas, se dirigió con unos pocos hombres hacia la Costa Atlántica, donde estaba el grueso de las tropas liberales, viajando por pipante a través del río Coco, en medio de la selva, con soldados sandinistas, indígenas formarían una eficiente aunque primitiva marina de guerra con sus pimpantes, llevando por el río guerrilleros, municiones y alimentos.Varías semanas después alcanzó al General Moncada en Río Grande y se entrevistó con él para solicitarle armas y municiones, para su gente, que según sus planes formaría una columna segoviana que operaría en la región norte del país, al iniciarse la marcha del ejército hacia el Pacífico. Moncada se negó, y Sandino siguió para Puerto Cabezas, donde estaba Sacasa con su gobierno, llegando allí para la Navidad de 1926, precisamente cuando la Marina de Guerra declaraba la zona neutral y desarmaba a Sacasa, lanzando el armamento al agua. En aquellas guerras civiles los ejércitos eran formados con peones de las haciendas, y los hacendados, actuaban como generales; el gobierno reclutaba forzosamente a los campesinos para enviarlos al frente de batalla, sin ninguna preparación militar previa y armados de viejos rifles Krag que se habían utilizado en la guerra entre Estados Unidos y España a finales del siglo anterior, con lo que las mortandades eran terribles, pues además se peleaba con tácticas cerriles, avances descubiertos de infantería, encuentros cuerpo a cuerpo, sitio de poblaciones, mientras los generales permanecían a la retaguardia, siempre convenientemente lejana. Guerra civil significaba hambre y viudez, los miembros y las familias quedaban abandonadas y los caminos se llenaban de niños pordioseros huérfanos. Sandino aparecía como un General del pueblo que lejos de rehuir la lucha, participaba en ella brazo a brazo con los soldados de su columna, que multitudinaria pero disciplinadamente andaban tras él y tras la bandera enarbolada desde entonces en sus filas de colores rojo y negro, con la inscripción LIBERTAD O MUERTE.. Moncada, interrogó a Sandino, en reclamo: -¿Y a usted, quién lo hizo General? -Mis hombres, señor - respondería él.-Después de haber batido a las fuerzas del gobierno en San Juan de Segovia y Yucapuca tras una batalla de 12 horas, la columna segoviana de Sandino toma en marzo de 1927 la ciudad de Jinotega, marchando en el flanco derecho de Moncada, y el 2 de mayo, cuando Moncada se prepara a la rendición frente a Mr. Stimson, ocupa Sandino el Cerro del Común, frente a la ciudad de Boaco, Sandino examina esa larga noche de meditaciones en el Cerro del Común,Tiene dos alternativas: entregar las armas, licenciar a sus hombres; o resistir hasta la muerte frente al poderoso ejército de los Estados unidos, Los intereses que tradicionalmente se ponían en juego en las guerras civiles, indicaban que era una locura resistir; a Sandino se le estaban ofreciendo mulas, caballos, dinero, un puesto público como Jefe Político del departamento de Jinotega, prebendas y granjerías.-Sandino decidió aquella noche resistir, más con ánimo de sacrificarse como un ejemplo futuro, que con pretensiones de una victoria militar. Aquella decisión transformaría una guerra civil de facciones oligárquicas, en una larga guerra de liberación nacional; transformaría una guerra de soldados reclutados a la fuerza y de generales oportunistas, en una guerra en que generales y soldados serían todos pobres e hijos del pueblo, que andarían en harapos, que se llamarían unos a otros hermanos y cuya consigna escrita al pie de todos sus documentos oficiales( junto a un sello que representaba a un campesino decapitando con un machete a un soldado yanqui,) sería la de Patria y Libertad; y aquella guerra convencional de montoneras, se transformaría en la primera guerra de guerrillas librada en el continente americano.
Autores: Jorgelina Lujan y Alberto Koller
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